domingo, 22 de marzo de 2009

Transilvania

Lo primero que uno tiene que decir sobre esta región tan famosa en el mundo es que de entrada no tiene que ver con Drácula ni otros seres que la fantasía de Hollywood nos ha hecho imaginar.

Es una región muy bonita porque, al menos en lo que me tocó conocer un fin de semana, las montañas (los Cárpatos) están llenos de árboles y forman bellos paisajes junto con la arquitectura típica, que en parte es un combinación entre alemán, oriental y otros.

Todo esto se aprecia estupendamente desde el tren, sobre todo cuando afuera nieva y uno está resguardado en su asiento, je je. Esas vistas son geniales.

Después de llegar a Brasov, donde pasaríamos la noche, tomamos un transporte de nuestro hostal al castillo de Bran, el que el escritor británico Bram Stoker utilizó imaginariamente como morada de Drácula en la novela del mismo nombre, a pesar de que geográficamente lo situó en otro lugar en el que las autoridades rumanas construyeron un hotel con esas características para el turismo que acude a seguir la ruta de ese personaje inspirado en Vlad Tepes, un personaje histórico y sanguinario.

Pues bien, este castillo no es lo que todos imaginan cuando se hace esta referencia, las mismas guías e información oficial turística lo aclaran: poco tuvo que ver con Tepes. Esto puede llegar a decepcionar a los que esperan ver alguna referencia draculesca en su interior, porque el camino al recinto está lleno de puestos de recuerdos y artesanías, en algunos de los cuales se explota la figura de Drácula.

Lo cierto es que es totalmente blanco y pulcro por dentro, además de decorado a la usanza de finales del siglo XIX e inicios del XX, pues fue residencia real. Vale la pena visitarlo, pues la construcción en sí y sus interiores son muy bonitas.

Entre Bran y Brasov se encuentra la ciudadela medieval de Rasnov. Son en su mayor parte ruinas antiguas, aunque hay algunas construcciones en pie, como dos iglesias, un recinto para el museo, las entradas y torres. La vista de la ciudad a sus pies, ya que esto está en la cima de una montaña, es espectacular.

Luego hablaré en particular de Brasov, que se me hizo una ciudad muy bonita y agradable. Por lo pronto aquí queda un relato muy turístico de esta primer parte del recorrido transilvano.

lunes, 16 de marzo de 2009

Rumanía

Bucarest.- Esta mañana finalizó un viaje "aventurero" a este país durante un fin de semana. Ha sido muy interesante y enriquecedor, por las vivencias, conocimiento y experiencias.

Hay bellos paisajes, hermosas construcciones, algunas descuidadas, sobre todo en esta ciudad, otras relucientes y bien conservadas. Me tocó ver Transilvania nevada, admirar casas con su estilo muy particular.

En cuanto al trato con las personas, muchos rumanos son tan amables que te auxiliaban lo más posible cuando les planteabas alguna duda, o te ofrecían ayuda sin pedirla al ver tu situación de incomunicación idiomática, lo cual resultó siempre muy oportuno; en otros casos, tuve que pelearme varias veces con otros de ellos, que algunos son tan fieros que casi muerden.

En este sentido es amplio el contraste entre ambos estilos, pero todo indica que de una forma u otra demuestran así su fuerte carácter. He escuchado que en la forma de ser de cualquier población es influida por el clima y la geografía, ambas en este caso un poco duras, al menos por el clima particular de fin de invierno que nos tocó vivir.

Por lo pronto están estas primeras pinceladas, que espero abundar en los próximos días.

miércoles, 11 de marzo de 2009

11-M

Han pasado cinco años de que España viviera horrorizada su peor atentado terrorista en su historia: 191 muertos y dos mil 62 heridos, tras la explosión de 10 artefactos en cuatro trenes de Cercanías (que recorren distancias medias entre la ciudad y sus suburbios), en las estaciones madrileñas de Atocha, Santa Eugenia y el Pozo del Tío Raimundo.

Este lustro pasó casi desapercibido por el gobierno español (lo que en México llamaríamos federal) que encabeza José Luis Rodríguez Zapatero, quien asistió a la conmemoración del hecho en el pleno del Congreso de los Diputados junto con la mayor parte de sus ministros.

Pero no realizó ningún acto especial, sino que fue la Comunidad de Madrid (que en México equivaldría a un estado de la federación) quien hizo un homenaje a las víctimas. Y aquí no estuvo ningún representante del partido de Zapatero, el PSOE (Partido Socialista Obrero Español), en protesta porque Esperanza Aguirre, la presidenta regional, decidió cerrar la investigación de una supuesta trama de espionaje al interior del gobierno comunitario.

Los del PP (Partido Popular), que dirige Mariano Rajoy, quien tras el 11-M, a pesar de llevar la delantera en las encuestas hasta ese momento, perdió las elecciones frente a Zapatero, se dedicaron a criticar a los socialistas por su falta de sensibilidad y mezclar "discrepancias políticas" con la participación en este evento.

Realmente el boicot socialista es para todos los eventos, sin distingo de importancia, "en tanto no haga un gesto de mínimo respeto a la ciudadnía madrileña", en palabras de Tomás Gómez, secretario general del Partido Socialista Madrileño-PSOE, por cerrar precipitadamente la comisión investigativa sobre el supuesto espionaje, dado a conocer por el diario El País.

Así, el partidismo (que no política, como comúnmente decimos, y que se me hace impreciso o incorrecto) contamina un evento al cual parecen haberse olvidado las autoridades en general. Si bien al principio se culpó por costumbre a la organización terrorista vasca ETA, después se vio que fue obra de Al-Qaeda.

Pero el tiempo ha hecho que se sume a la lista de hechos del mismo estilo que han cobrado víctimas, que no han impedido que la vida normal continúe, pese al trauma provocado en el momento.

En este sentido, llama la atención la declaración de Pilar Manjón, presidenta de la Asociación 11-M Afectados del Terrorismo, al reprochar el olvido institucional: "sería su segunda muerte".

Entrevistada por el periódico ya citado, Manjón, quien perdió un hijo en los hechos de hace cinco años, declara que hay víctimas que no tienen dinero ni para comer, porque ya nos les interesan a las autoridades.

Con la crisis económica en la mente del gobierno y los ciudadanos, pues gracias a que ETA ha sido acosada y ha disminuido sus ataques ya el terrorismo no está tan presente en sus mentes como problema urgente, la justicia que se les debe a los afectados parece lejana.

Y como las tropas españolas fueron retiradas de Irak, conste que no de Afganistán, no hay por lo pronto amenaza de la presunta red de Osama Bin Laden a territorio español.

Para colmo, el monumento en recuerdo de las víctimas, ubicado en la estación de Atocha, donde confluyen todas las líneas de Cercanías, y cuya elección dentro de las opciones de proyectos fue polémica en su momento, se daña a cada rato debido al material con que fue construido.

¿Quedarán de esta manera, con el panorama presentado, las víctimas en un olvido cada vez mayor, para así volver a morir, como dijera Manjón? ¡Qué tristeza e indignación!

domingo, 8 de marzo de 2009

Cabello

En el transcurso de la semana pasada fui a cortarme el cabello, la primera vez en España, lo cual significa que dejé que mi pelo creciera más de cuatro meses seguidos sin que sintiera el corte de las tijeras.

Es lo que hasta el momento me he dejado más largo; como me crece rápido, siempre terminaba yendo al mes o mes medio a cortármelo por desesperación. En este caso ayudó mucho que hiciera frío y la cabellera sea una protección natural contra las inclemencias del tiempo. La foto incluida aquí indica hasta dónde llegué.

Lo curioso en este caso es que es difícil dar con una peluquería que atienda a caballeros. Como no había tenido necesidad de buscar este establecimiento, decidí correr suerte con los que se encuentran en mi barrio.

Fue inútil, ninguno atiende a hombres. Incluso, me sorprendió que si uno pregunta si tienen ese servicio hasta parece que uno les estorba con su presencia masculina, porque el trato fue muy descortés y en algunos casos hasta grosero.

Probablemente ellas (porque quienes cortan a hombres son hombres, y así con las mujeres, por lo que veo) están muy acostumbradas a que así son las cosas acá en este aspecto, y yo, a que en México la gran mayoría de las estéticas son unisex, es decir, atienden tanto a mujeres (su mayor clientela siempre) y hombres.

En eso del mal trato, los madrileños pecan muchas veces para nosotros los latinoamericanos. El argentino que me cortó el cabello me decía mientras usaba las tijeras, porque le gustaba mucho expresar sus pensamientos y hasta detenía el proceso del corte por momentos para manifestarlos con firmeza, que se esfuerza por ser amable y que los clientes lo valoren por el buen trato, pero ha descubierto con tristeza que los lugareños están acostumbrados a que les traten feo.

¿Cómo se define este mal trato o falta de amabilidad? Entre otras cosas en no saludar en la bienvenida, dejando de usar las palabras "por favor" y "gracias", y la falta de tacto. ¿Será que a veces exageramos con la gentileza en América Latina en general? Puede ser que llegamos a este extremo, aunque lo prefiero a su opuesto.