Crecida principalmente a partir de que Francia tomase control del territorio del actual Marruecos, la ciudad desarrolló un estilo arquitectónico que combina lo europeo y lo arábigo, que puede verse en los edificios de calles céntricas, algunos de los cuales por desgracia han caído o se están cayendo por falta de restauración.
Otras edificaciones, sobre todo las de instancias públicas, están más en pie. El blanco es el color dominante de todas las que recientemente han sido recubiertas de pintura.
La ciudad también cuenta con su medina (casco histórico), que está muy bien delimitada por una muralla, y donde como en todas se pueden encontrar numerosas mercancías, principalmente recuerdos o souvenirs.
En todas las medinas y comercios que conocí de este país me sorprende la habilidad y disposición de vender. Ahora de verdad entiendo por qué en México decimos que alguien es "árabe" cuando le gusta estar vendiendo y comerciando cosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario